Director y guionista francés, devoto del cine americano y uno de los más exitosos y comprometidos realizadores de su país, versátil para afrontar diferentes géneros aunque siempre a partir de tramas de fuerte contenido ideológico.
Nacido en Lyons, donde creció su vocación por el cine, se mudó luego a París a estudiar abogacía en la Sorbona e introducirse en la industria cinematográfica como asistente de Jean-Pierre Melville.
No conforme con su rol de técnico, comenzó a trabajar como crítico cinematográfico en Positif y en la célebre revista Cahiers du Cinéma, cuna de muchos de sus cineastas preferidos, como Jean-Luc Godard, Claude Chabrol y Claude Sautet, de quienes fue agente de prensa. También escribió dos libros sobre el cine norteamericano, del cual es confeso cultor y crítico.
Después de dirigir algunos cortos, en 1974 debutó en el largometraje con una adaptación de la novela de Georges Simenon El relojero de St. Paul (L'horloger de St. Paul), que recibió el Oso de Plata en el Festival de Berlín y que protagonizó Philippe Noiret, actor que trabajaría en varias de sus realizaciones posteriores.
El año siguiente hizo dos películas de distintos géneros: el premiado drama histórico Que la fiesta comience (Que la féte commence, 1975) y el drama psicológico El Juez y el asesino (Lejuge et l'assassin, 1975). Luego dirigió Des enfants gatés (1977) y un polémico y premiado film de ciencia-ficción, La muerte en directo (La mort en direct, 1980), sobre una persona cerca de la muerte que deja que le introduzcan una cámara en sus ojos para poder ver sus últimos días en directo.
A esta le siguieron el drama familiar Une semaine de vacances (1980) y la comedia negra Más allá de la justicia (Coup de torchon, 1981), que terminó por demostrar su gusto y capacidad para variar de géneros. En los años siguientes profundizó en la línea de los dramas individuales, familiares y sociales, como Alrededor de la medianoche (Round Midnight/Autour de minuit, 1986), sobre un saxofonista de jazz autodestructivo, Un domingo en el campo (Un dimanche à la campagne, 1984), uno de sus filmes más celebrados, y Nuestros días felices (Daddy Nostalgie, 1990), con Dirk Bogarde.
Durante la década del 90 realizó varios documentales y también uno de sus trabajos más exitosos en materia de público, La carnada (L'appat, 1995), polémica visión sobre la juventud francesa acusada de moralizante por gran parte de la crítica. Su siguiente película fue Capitán Conan (Captaine Conan, 1996), un fuerte relato antibelicista al que siguieron dos obras de corte social como De l'autre cote du periphe (1998) y Todo comienza hoy! (Ca commence aujourd'hui, 1999).
lunes, 2 de noviembre de 2009
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